16 de diciembre de 2022.- OpenAi, una fundación de inteligencia artificial creada en 2015 por inversores de Silicon Valley, entre ellos Elon Musk, ha lanzado un nuevo modelo de chatbot.

ChatGpt es capaz de entender el lenguaje humano y mantener conversaciones incluso muy complejas. En una semana, más de un millón de usuarios lo probaron visitando chat.openai.com.

ChatGpt se basa en muestras de textos extraídos de Internet (libros, artículos de periódicos y páginas web) para agilizar la obtención de respuestas sobre una gran variedad de temas. Una preocupación para gigantes como Google, si una iniciativa de este tipo se convirtiera algún día en una aplicación en toda regla, dejaría obsoleta la búsqueda web. Sin embargo, ChatGpt no está libre de errores. Stack Overflow, uno de los sitios más utilizados por los programadores, ha prohibido el proyecto por considerar que las respuestas generadas por los redactores de código son engañosas.

Respuestas sobre todo tipo de temas, no siempre correctas.

«El principal problema es que las pistas producidas por ChatGpt tienen una alta tasa de errores, a pesar de que en general tienen buen aspecto», afirma Stack Overflow en un post. Según OpenAi, el proyecto «puede generar ocasionalmente información incorrecta y producir instrucciones maliciosas o contenidos distorsionados. También tiene un conocimiento limitado de lo que ocurrió después de 2021».

Para probar ChatGpt, basta con registrar una cuenta en el sitio OpenAi o iniciar sesión con un perfil de Google o Microsoft. Precisamente dos de los gigantes que han probado la inteligencia artificial en aplicaciones abiertas a lo largo de los años, con poca suerte. Tay, el bot de Microsoft, fue retirado en 2016 por una serie de frases racistas autoproducidas en Twitter, mientras que Google Lamda ha estado en el centro de una reciente polémica, con despido adjunto de un ingeniero, por volverse «demasiado» sensible en comparación con el programa inicial.